El RYCK 280 tiene la cabina continua más grande de su clase. Permite acceder a todas las funciones de forma cómoda y directa, ya sea al motor, al refrigerador, al dispositivo de anclaje o a la estación central. Además, la cabina se puede convertir en un abrir y cerrar de ojos: la zona de asientos de la popa puede pasar a ser un gran solárium en tan solo unos pasos. Mucho espacio de almacenamiento (por ejemplo, bajo el banco y la mesa) para guardar el equipo; también hay disponibles refrigeradores adicionales.