A bordo del Sealine C335 se encadena un grandioso momento tras otro, y esto es gracias a una experiencia de conducción intensa y deportiva generada por un motor de 440 CV, un novedoso panel de instrumentos claramente estructurado y la grandiosa visión panorámica desde el puesto de mando.
Incluso en el camarote del propietario disfrutará de luz procedente desde todos los lados.
Los tejidos de primera calidad y las maderas nobles crean una atmósfera lujosa y agradable única en su clase. El punto central del Sealine C335 es un luminoso salón, que satisface las más altas expectativas en cuanto a estética y amplitud. ¡Bienvenido a bordo!